Final de la Champions 2016

LA  FINAL DE " LA CHAMPIONS   2016 "

Se ha celebrado entre los dos equipos madrileños, el Real Madrid y el Atlético de Madrid, y ha sido proclamado campeón el Real Madrid, después de terminar empatados a 1, en el tiempo reglamentario, así como en la prórroga, y ganar en la primera tanda de penaltis por 5 a 4.

Decía en mi comentario previo a la final, que esperara fuera un buen partido, que ganara el mejor y que no hubiera ningún error decisivo del arbitro. El partido no tuvo la calidad que se esperaba, no fue de un gran nivel técnico, los dos equipos jugaron por debajo de su gran calidad, acreditada en partidos anteriores. Sólo tenía un alto grado de emoción, por la importancia del título en juego.

Y pasó que no se produjera, un error del arbitro al dar como legal el gol del Real Madrid, que se hizo en fuera de juego por Sergio Ramos, a la larga resultó decisivo en la adjudicación del título. 
Sin este gol que debió ser anulado, el tiempo reglamentario habría acabado con la victoria del Atlético de Madrid por 1 a 0.

El culpable de esta injusticia es la UEFA, que es incapaz de
actualizar su organización y sus sistemas, con un mínimo de la tecnología,  que ya hace más de 30 años está disponible, a través de
un simple monitor de televisión, que en las jugadas dudosas de un posible fuera de juego, se pare el partido y se revise el vídeo, y en sólo un minuto o dos, se pueda decidir con justicia.
Si se tuviera la voluntad de hacerlo, sería tan fácil como situar un juez de línea experimentado, con un monitor de tv, de los cientos que hay en todo evento importante, y conectado con los auriculares
del arbitro, advertirle de la legalidad o no del gol en cuestión.

Ahora han presentado en este partido, un sistema tecnológico para evaluar si es gol o no el llamado gol fantasma. Y está bien este avance de tecnología, pero han empezado la casa por el tejado, el posible gol fantasma, se produce más o menos, cada diez años en un partido en todo el mundo, y por contra los fueras de juego que pueden ser decisivos, se producen uno o dos por partido.

Días después del partido ha anunciado la UEFA , que este verano van a hacer pruebas, para evaluar por un monitor de tv, si se hace o no penalti, fueras de juego, agresiones, etc. Y demuestran una vez más, que no saben lo que hacen, parece que ponen en ciertos cargos a personas, que no tienen ni idea de fútbol. Los posibles penaltis, tarjetas, agresiones, etc. las ve mejor que nadie el arbitro del campo, al estar más cerca de la jugada, y su juicio debe ser el que prevalezca, aunque venga bien cualquier ayuda técnica. 

Analizando el fútbol de la final, lo primero que quiero resaltar es la extrañeza por la salida al campo del Atlético, empezó el partido sin alma, como cohibido, descolocado, frío y un poco temeroso. más difícil de comprender, sabiendo la personalidad de su entrenador Simeone, que da al equipo una mentalidad suprema, en la entrega y tensión de juego, no sé, no lo entiendo, como no fuera que los jugadores se vieran sobrepasados por la importancia del evento.

En este período concedió dos ocasiones claras de gol, no en alguna jugada virtuosa del Madrid, sino en dos simples centros de dos faltas laterales, que para una zaga tan experimentada como la del Atlético debían ser sencillas de despejar. Y una no fue gol, porque la salvo su portero Oblak de forma milagrosa, y la otra supuso el gol ilegal de Sergio Ramos, a la postre decisivo.
Tardo una media hora en centrarse los atléticos, y ya desplegaron su juego habitual, aunque sin ninguna brillantez, y con el peso moral, de tener que remontar un gol en contra, que a su rival le daba un extra de moral y confianza.

La segunda parte ya fue otra cosa, el Atlético salió a por el partido y tuvo una fase de unos 20 minutos extraordinaria, ya parecía el equipo de las grandes ocasiones, y mereció conseguir el gol que necesitaba para igualar el partido. Tuvo una ocasión óptima con el penalti que forma inocente, hizo Pepe a Torres, y ahí se produjo otro hecho clave del partido, cuando su mejor hombre Grieztman 
falló su disparo. Ahí aparecieron todos los fantasmas del buen equipo Atlético, al que parece perseguir la mala suerte en los momentos claves de la Champions.                                                          Por contra el Madrid jugaba de forma tranquila y serena sin hacer nada extraordinario, sólo controlar el juego, con la técnica exquisita de sus jugadores del centro del campo y esperando alguna oportunidad al contrataque, que tuvo dos, una muy clara por parte de Benzema que estrelló el balón en el portero. 

El Atlético siguió empujando al Madrid hacia su área, más por ilusión que por juego, con unos Gabi y Koke excelentes en su infatigable trabajo en el medio campo, y con un deslumbrante Carrasco, que desequilibraba casi siempre a la defensa blanca. Y llegó el gol del empate que merecía el equipo colchonero.

El partido finalizó en su faceta deportiva, cuando se le acabaron las fuerzas a los atléticos, y los blancos estaban como al paso, como sabiendo que la suerte les daría el triunfo final. Y así pasó la prórroga sin nada futbolístico que resaltar, salvo los malos modos y tretas de Pepe, un jugador indigno de la categoría del Madrid.

Como jugadores más destacados, cabe reseñar por parte atlética a 
Gabi, Koke y Carrasco, y los más discretos fueron Grietmann y 
Saúl, muy por debajo de su nivel real.

En el Madrid los mejores fueron Casimiro , Sergio Ramos y Pepe
menos su actitud, y los más flojos Benzema y sobre todo Ronaldo, con una actuación indigna de su categoría, sólo Bale con una buena actuación, daba sensación de peligro.

Faustino Gazpio                           tinogaz3@gmail.com          

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